Segundo día haciendo mi: Devocional (lo cual significa estudios de la palabra de DIOS, acompañado de meditación y oración), el cual espero hacer siguiendo la lectura diaria del calendario de lectura que tengo, llevando siempre anotaciones y bueno, tantos detalles serían útiles para desarrollar el espíritu y alma.
El día de hoy en la lectura, los versos son: Romanos Capítulo 15, del 1 al 13.
Parece ser que el Señor estaría jugando con nuestra autoestima... ahora entiendo que Pablo, el más pequeño de todos los apóstoles, además el peor de todos... pues persiguió a los mismos discípulos llevándoles hasta la muerte a muchos de ellos, antes de hacerse llamar un convertido, niega la eficacia de las enseñanzas del Mesías, en estos, como en muchos otros versos, pues escrito está: "Ama a tu prójimo como a ti mismo."
En cambio Pablo dice en su Epístola: "debemos soportar ... y no agradarnos a nosotros mismos."
Es decir aguanta no más y déjate utilizar, déjate manipular, déjate hacer lo que otros quieran hacerte y sobre todo nada de buscar el amarte a ti mismo.
Es lo mismo que dicen muchos de los falsos maestros, gente religiosa que anda por allí las calles o están escondidas en iglesias... como supuestos líderes, ya sea enseñando, ya sea cantando, ya sea tocando algún instrumento o en desempeñando actividad eclesiástica, de la religión o iglesia que quieras mencionar.
Pero la escritura también muestra, según lo que El Mesías dijo "que también debemos amarnos a nosotros mismos". Es decir debemos ser de nuestro propio agrado, nada que ver con una vida de total abnegación y como versa la típica palabra de nuestra sierra ecuatoriana: "Pegue patrón", o "Deje no más, que marido es". Esos son términos de esclavitud, esclavitud de la cual ya es hora de ir saliendo.
La verdad es que las cosas con Dios si son como nuestro corazón anhela que sean. Bien es cierto en el mundo gana el mas fuerte y en las batallas ganan por mérito propio los mejores.
¿Puedo yo ser el más fuerte o ser el mejor?
DIOS no está en el templo Celestial juzgando a las personas por sus malos actos, o mandando condenación a diestra y siniestra con rayos y centellas.
El no se agrada de nuestro orgullo y su poder se perfecciona en nuestra humana debilidad, pero todos somos humanos y no dejaremos de ser débiles por más que intentemos.
Así que no es cosa de mundanos buscar una buena presencia o un buen aspecto, simplemente es cuidado del cuerpo.
El apóstol Pablo, más bien expresa las perversiones de un hombre necio que asegura ser un enviado de DIOS y con tantas muestras de su propia experiencia mística y esotérica, termina convenciéndoles a todos, que él sería el Maestro que tanto esperaban.
Ciertamente tenemos puntos sobresalientes en las apreciaciones de este muy querido apóstol en estos tiempos, a quienes muchos atribuyen la expansión del evangelio y el crecimiento de la "Iglesia", pero muy pocos se dan cuenta del tipo de enseñanza que se encubre detrás de sus epístolas. Sepan que sin paños tibios de verdad no se puede tapar la herida que lleva en sí el engaño.
Pero el Mesías mismo advirtió que estos tiempos vendrían, así que lo mejor es aprender a leer, a entender y comprender. Sabiendo que nuestro Creador es muy cuidadoso y detallista, para dejar pasar por alto tales tipos de tergiversaciones, lo cual significa torcer o corromper las escrituras.
El día de hoy en la lectura, los versos son: Romanos Capítulo 15, del 1 al 13.
Parece ser que el Señor estaría jugando con nuestra autoestima... ahora entiendo que Pablo, el más pequeño de todos los apóstoles, además el peor de todos... pues persiguió a los mismos discípulos llevándoles hasta la muerte a muchos de ellos, antes de hacerse llamar un convertido, niega la eficacia de las enseñanzas del Mesías, en estos, como en muchos otros versos, pues escrito está: "Ama a tu prójimo como a ti mismo."
En cambio Pablo dice en su Epístola: "debemos soportar ... y no agradarnos a nosotros mismos."
Es decir aguanta no más y déjate utilizar, déjate manipular, déjate hacer lo que otros quieran hacerte y sobre todo nada de buscar el amarte a ti mismo.
Es lo mismo que dicen muchos de los falsos maestros, gente religiosa que anda por allí las calles o están escondidas en iglesias... como supuestos líderes, ya sea enseñando, ya sea cantando, ya sea tocando algún instrumento o en desempeñando actividad eclesiástica, de la religión o iglesia que quieras mencionar.
Pero la escritura también muestra, según lo que El Mesías dijo "que también debemos amarnos a nosotros mismos". Es decir debemos ser de nuestro propio agrado, nada que ver con una vida de total abnegación y como versa la típica palabra de nuestra sierra ecuatoriana: "Pegue patrón", o "Deje no más, que marido es". Esos son términos de esclavitud, esclavitud de la cual ya es hora de ir saliendo.
La verdad es que las cosas con Dios si son como nuestro corazón anhela que sean. Bien es cierto en el mundo gana el mas fuerte y en las batallas ganan por mérito propio los mejores.
¿Puedo yo ser el más fuerte o ser el mejor?
DIOS no está en el templo Celestial juzgando a las personas por sus malos actos, o mandando condenación a diestra y siniestra con rayos y centellas.
El no se agrada de nuestro orgullo y su poder se perfecciona en nuestra humana debilidad, pero todos somos humanos y no dejaremos de ser débiles por más que intentemos.
Así que no es cosa de mundanos buscar una buena presencia o un buen aspecto, simplemente es cuidado del cuerpo.
El apóstol Pablo, más bien expresa las perversiones de un hombre necio que asegura ser un enviado de DIOS y con tantas muestras de su propia experiencia mística y esotérica, termina convenciéndoles a todos, que él sería el Maestro que tanto esperaban.
Ciertamente tenemos puntos sobresalientes en las apreciaciones de este muy querido apóstol en estos tiempos, a quienes muchos atribuyen la expansión del evangelio y el crecimiento de la "Iglesia", pero muy pocos se dan cuenta del tipo de enseñanza que se encubre detrás de sus epístolas. Sepan que sin paños tibios de verdad no se puede tapar la herida que lleva en sí el engaño.
Pero el Mesías mismo advirtió que estos tiempos vendrían, así que lo mejor es aprender a leer, a entender y comprender. Sabiendo que nuestro Creador es muy cuidadoso y detallista, para dejar pasar por alto tales tipos de tergiversaciones, lo cual significa torcer o corromper las escrituras.
Escrito: 17 de Diciembre del 2006, modificados: 2013
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