Las frustraciones de este mundo, la injusticia de los hombres, la maldad personificada en los demás.
Viven de matar, matando para vivir, sin poder existir realmente por no aprender a amar.
Que pasaría si el amor de tu vida, la verdad, la verdad, ella te amara, pero no la pudiste alcanzar, pero aún así, ella no te puede dejar de amar.
Porque esta en tu corazón, y por ese amor tuyo, ella tampoco se puede desconectar. A mi personalmente me parece ese como el maravilloso amor de Dios, que aunque no le podamos tener visible, y a veces ni le atendemos realmente, producto de la oposiciń exterior que combate en este mundo. Olvidamos que el Señor es nuestro verdadero amor.
Este amor preciado por otra persona, es como el oro. Pues se expresa excelsamente en la entrega, y auunque aquella persona presa se encuentra de este amor, a pesar de aquello puede encontrar la libertad, libertad del amor.
Por que el amor es verdaderamente libertad, quien ama libera, pues también se ha vuelto libre para amar.
Hoy aprendi a cambiar mi obsesión de amor, por aquella persona especial, y darle mi amor a Dios, y así podré entender lo que quiero en verdad.
Todos mis anhelos, mis necesidades y mis aprecios, son para el Señor.
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